Combina platos tradicionales asturianos con sidra natural, brindando una experiencia gastronómica auténtica y familiar.
Más sobre este sitio¿A qué saben los colores? Alrededor de esta pregunta gira el restaurante Sinestesia. 16 comensales, 8 platos y un chef con 2 Estrellas Michelin. Disfruta en Madrid de una experiencia multisensorial única.
Más sobre este sitioEmbárcate en un viaje sin salir de Madrid. Onno es un restaurante japonés fusión que te sorprenderá, con dulces, cítricos y picantes en un mismo menú.
Más sobre este sitioBaelo Gastronómico es un restaurante ubicado en una antigua casona de Torrelodones. Ha sido galardonado con el prestigioso premio Travel Awards durante tres años seguidos, y cuenta en su carta con un atún rojo traído directamente de las Lonjas de Cádiz y las mejores carnes maduradas.
Más sobre este sitioRestaurante italiano en el barrio de Salamanca, dedicado a la pasta fresca. Los platos son tanto un homenaje a la tradición como una celebración de la creatividad. Ambiente sofisticado, perfecto para reuniones y cenas en pareja.
Más sobre este sitioCasa de especialidades en pleno Malasaña. Carta breve y platos reconocidos llevados a un nuevo nivel. Amplia oferta de bebidas tanto en cervezas como en combinados en un ambiente desenfadado. Perfecto para cenar y tomar las primeras copas antes de salir de noche por la zona, y para disfrutar de comidas en familia los fines de semana.
Más sobre este sitioInaugurada en 1935 en el barrio madrileño de Argüelles, Casa Ricardo se distingue por su atmósfera familiar y acogedora, impregnada de lo español y lo taurino. La cocina, fiel a la tradición gastronómica española, ofrece especialidades como rabo de toro, callos a la madrileña, gallina en pepitoria, bacalao al pilpil y cocido madrileño (disponible por encargo). Cada plato refleja
la autenticidad y el sabor arraigado en la rica historia culinaria de España, brindando a los comensales una experiencia única de tradición y excelencia.
En esta histórica taberna familiar, con más de 60 años de tradición, se han especializado en pinchos variados, desde salmón y atún hasta espinacas, merluza, bacalao, morcilla, lomo y quesos, todos gratinados al momento. Además, propone clásicos como tortillas, empanadillas y croquetas de jamón y huevo. Sumérgete en una experiencia culinaria que fusiona la autenticidad de la
tradición familiar con sabores inolvidables.
Establecida sobre una antigua taberna de 1929, conserva la arquitectura tradicional de las tabernas madrileñas. Refundada en 1989, ofrece vermú y cerveza desde un serpentín enfriado a la antigua. Rigurosa con los platos típicos y generosa con las tapas, se presenta como un espacio que fusiona con elegancia la tradición y la modernidad, sirviendo una cocina de mercado con
influencias originales.
Es La Mina un bar bien conocido por el vecindario de la zona por sus extraordinarios aperitivos. Y no es extraño porque aquí no falta de nada para que ese momento tan disfrutón sea perfecto. Sello de autenticidad ni más ni menos que desde 1949, cañas tiradas con verdadera maestría, un servicio espectacular, buen ambiente y una terraza soleada y bien situada. De su breve carta,
¿y para qué más? Destacan sus gambas a la plancha y sus pinchos morunos, pero pidas lo que pidas no hay margen de error: croquetas caseras, boquerones en vinagre, lomo ibérico, lacón a la gallega y una interesante sección de conservas.