El establecimiento presenta una oferta gastronómica centrada en la cocina castellana tradicional, con un menú que incluye platos representativos de la región, como las judías al puchero y diversas carnes a la parrilla. Además, se pueden encontrar postres caseros que complementan las opciones saladas. Esta propuesta culinaria se desarrolla en un espacio que mantiene la esencia histórica, brindando un ambiente distintivo para los comensales.
El local cuenta con una cueva centenaria que añade un componente singular al ambiente. Este espacio, adecuado para diferentes tipos de eventos, ofrece una opción idónea para disfrutar de una comida en un entorno más íntimo o para celebrar ocasiones en familia o con amigos. Además, la disposición de las instalaciones permite la adaptación a reuniones de diversos tamaños y necesidades.