Esta terraza ubicada en las inmediaciones del Retiro ha sido diseñada para ofrecer un espacio cómodo y accesible al público local. Más que un restaurante al uso, es un punto de encuentro donde se puede desayunar, tapear, tomar un aperitivo o disfrutar de un rato de tardeo con bebida y algo ligero.
La carta está enfocada en platos para compartir o picar, sin una estructura de comida formal. Pinchos, tapas y opciones sencillas para acompañar una bebida forman la base de la oferta, pensada para quienes buscan un descanso en medio del día o una pausa sin necesidad de sentarse a comer un menú completo.
El espacio destaca por su ubicación práctica y su entorno sombreado, que permite disfrutar del exterior en cualquier época del año. El servicio es ágil y cercano, con atención constante y un ritmo que se adapta bien a las necesidades del cliente, ya sea para una parada rápida o para prolongar la sobremesa.
Esta terraza se posiciona como una opción informal en el entorno del parque, con una propuesta clara: bebidas bien servidas, algo para picar y un ambiente relajado que acompaña bien el ritmo de la ciudad.