La idea en la que se basa la tendencia que os traemos en este post sitúa a un reducido grupo de comensales que, citados en un lugar secreto y generalmente insospechado, se reúnen para deleitarse con las creaciones de un chef a su exclusivo servicio. Este tipo de restaurantes a puerta cerrada, conocidos también como restaurantes pop-up en el mundo anglosajón por su carácter itinerante, parecen tener su origen en Londres, desde donde rápidamente se exportó el concepto hasta Nueva York y otras partes del globo.
Estas selectas veladas suelen caracterizarse por sus originales puestas en escena y su marcado componente artístico, siendo habitual desplegar alguna iniciativa o exposición de obras artísticas. Ante todo, la esencia underground que dio forma a esta tendencia y el factor sorpresa son los sellos de identidad que convierten estos encuentros gastronómicos en algo tan especial.
Dinner in the Sky, máxima exclusividad
Pese al mencionado carácter alternativo de los restaurantes a puerta cerrada, existen alternativas que llevan el lujo y la máxima exclusividad por bandera. Y la más conocida es Dinner in the Sky, una plataforma elevada con espacio para varias mesas reservadas a los comensales más selectos.
Por sus fogones han pasado distinguidos chefs como Anthony Sedlak o Paco Roncero y por sus mesas personajes tan ilustres como el príncipe Alberto de Mónaco. Después de haber visitado lugares tan emblemáticos como Copacabana, el Big Ben londinense, la Marina de Dubái o el Duomo de Milán, esperaremos con impaciencia a que aterrice en Madrid. Aunque sólo sea por contemplar la espectacular estampa de la instalación flotando en el aire.
Dinner in the Sky – wordyboard.com
El modelo argentino
Uno de los países que mejor ha interiorizado este novedoso concepto de la restauración es Argentina. Su versión de los restaurantes a puerta cerrada llegó a las calles de Buenos Aires hace más de una década (durante los años posteriores al Corralito) bajo la influencia, por un lado, de los clásicos “paladares cubanos” (restaurantes por cuenta propia) y, por otro, de los pop-up anglosajones.
De esa combinación, nace un modelo de negocio que ofrece una experiencia culinaria, generalmente en una vivienda privada, centrada en la cercanía con el chef en cuestión. Éste pone a disposición de los asistentes una selección de sus mejores elaboraciones, intentando siempre ofrecer algo distinto que convierta la experiencia en algo único.
Cena clandestina Argentina – elcronista.com
La llegada de la tendencia a España
Si bien todavía andamos algo faltos de la presencia de muchas más alternativas, en España hemos acogido durante los últimos años numerosas propuestas culinarias pop-up destacables. Sin embargo, su carácter pasajero, secreto y muchas veces repentino es causante de que muchas de ellas no se hayan mantenido en el tiempo y, por otro lado, de que no exista una agenda de eventos predefinida.
Aún así, como nuestra razón de ser es manteneros informados, hemos indagado para dejaros una propuesta que seguirá desarrollándose (al menos) durante las próximas fechas. Tras recorrer distintas ciudades del mundo desde 2012 deleitando a los paladares más exquisitos, la cocinera peruana Anilú Cigüeñas nos regala puntualmente fabulosas experiencias gastronómicas “clandestinas”. LaCocinaClandestina organiza aparte talleres de cocina de manera esporádica, para que podamos aprender todo tipo de técnicas y elaboraciones. Os recomendamos que permanezcáis atentos a su web para no perderos las próximas actividades.
Cocina clandestina – canal cocina
